“No es el qué, ni el cómo. Es el por qué venir a nuestra escuela”
Tenemos claro que eso es lo que hay que cuidar y respetar.
Beneficios en el aprendizaje, desarrollo personal, neurológico, psicológico e ilusión.
Sueños de formar un grupo, beneficios en la educación de los hijos, espinas clavadas de la niñez y adolescencia, dedicarse profesionalmente en el futuro…
Los profesores respetamos el por qué . Y lo mimamos.
No decepcionar al alumno tenga la edad que tenga. Animarlo aunque haya momentos de dificultades o menor entusiasmo y motivación.
Los profesores somos poseedores de una gran responsabilidad. Cultivar ese por qué y conseguir que florezca en el alumno. Desde el propio camino escogido. La vocación de músico y la importancia de quien nos introdujo, respetó y cultivó nuestro por qué.